Hiperactividad
Doctor, doctor... ¡tengo un problema! ¿Qué hago levantada a las nueve y habiendo dormido cuatro horas un domingo de principio de cuatrimestre? Postear y escuchar cantopop con Faye Wong y Anita Mui, sí. Pero, busquemos el antecedente del prólogo de la introducción, es decir, retrocedamos a anteayer: reencuentro (sangría + churros) con un amigo (y compañía) que hacía cuatro años que no veía y que lo conocía sólo de un campo de trabajo en Alcalá la Real que duró quince días. De viaje entre pueblo y pueblo, pasando bajo túneles, pedíamos deseos conteniendo la respiración, cerrando los ojos y levantando las manos. Hace unos días pasó por un túnel en un viaje y se acordó de mí.
Ayer: por la mañana turismo con Julio (mi amigo recuperado) + por la tarde, reunión con el grupo de chicos transexuales + por la noche, Beers&Blogs Madrid + por la madrugada, fiesta en casa de Isma (compañero de clase). Hoy: reencuentro con Dora + entrenamiento de baloncesto (con este cuerpo, Diosa).
Lo peor es que no se reduce sólo a este fin de semana que pueda parecer excepcional. Después de un viaje me trago un rodaje, un entrenamiento de baloncesto, una juerga... recuerdo que hubo una vez a las cinco o seis de la madrugada en Jaén cuando me bajé de un autobús que me traía de Sevilla y me monté a continuación en otro para irme de senderismo. Sin dormir ni ná, Cazorla pal cuerpo.
¿Hay alguna academia para aprender a estarse quietecita simplemente y no apuntarse a todo?
0 Comentarios:
Publicar un comentario
<< Regresar