¿Y qué pinta este post aquí?

No es porque me parezcan más respetables por cultos, sino porque me encanta ese ambiente íntimo y fantasioso que se crea durante la lectura.
Incluso A. (alguien a quien odio amablemente) me parece mejor persona cuando le encuentro ensimismado en su libro.
Foto: Caperucita Roja en Manhattan. Ah, no, en Barcelona.
1 Comentarios:
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Publicar un comentario
<< Regresar