No entiendo para qué sirve un congreso
Últimamente hablo mucho con el profesor que organiza el congreso de ciberperiodismo de mi universidad y no acabo de enterarme de cuál es el objetivo del acontecimiento. El único motivo que se me ocurre para su existencia es el prestigio. Y, sin embargo, ahí está el pobre luchando contra viento y marea para lograr financiar nombres, igual que cuando se compone un cartel taurino.
Veamos, si yo quisiera investigar un fenómeno como los confidenciales, buscar formas de financiación de las ediciones digitales de la prensa o indagar en cómo se come eso de las bitácoras, crearía un grupo de investigación con unos objetivos y que diera al final como resultado, por ejemplo, una publicación sobre lo que se ha concluido. Incluso la investigación podría ir publicándose en directo.
Si, en cambio, mi ánimo es el de difundir el ciberperiodismo, luchar contra actitudes tecnófobas y el analfabetismo digital, trataría de crear un taller especial sobre el asunto y también asesoría a los profesores para que utilicen las herramientas de la red como soporte y fuente educativa.
Ahora bien, ¿para qué sirven cuatro charlas repartidas en dos días en un lejanísimo mes de marzo? Elogio el interés por crear actividades, ¿pero no sería mejor pensar en un formato más útil?
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